Extracto del artículo publicado en la revista Red Seguridad del mes de noviembre 2012:
La preocupación por la Seguridad de la Información ha sido una constante a lo largo de la Historia. Sin embargo, hasta el desarrollo y uso masivo en todos los ámbitos de la sociedad de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) no se ha empezado a considerar su defensa y salvaguarda como un eje fundamental para cualquier organización. La paradoja estriba en que a medida que crece la importancia y las posibilidades que ofrece el ciberespacio (entre otro, un número cada vez mayor de servicios ofrecidos a todos los ciudadanos por las AAPP), crecen sus riesgos y ataques. Da igual la tecnología, el dispositivo o el servicio empleado; mientras los atacantes consigan algún tipo de beneficio (económico o político), la ciberseguridad seguirá estando en la agenda de todos: gobiernos, empresas y ciudadanos. El Centro Criptológico Nacional (CCN), cuyo origen se remonta precisamente al año 2002, ha ido adecuándose a las nuevas amenazas y dirigiendo todos sus esfuerzos y energías en ofrecer nuevos servicios y soluciones capaces de afrontar los riesgos y amenazas del ciberespacio.