Hackers informáticos entraron el año pasado varias veces en la red interna de la compañía que gestiona la bolsa de valores electrónica de Estados Unidos, Nasdaq.
Las fuentes consultadas aseguran que la plataforma de intercambio comercial, en la que se ejecutan las órdenes de compra y venta de los operadores bursátiles, no se vio en ningún momento comprometida, si bien se desconoce qué otras áreas estuvieron expuestas a los intrusos.
Los investigadores barajan una serie de motivos que podrían tener los hackers para adentrarse en la red del grupo Nasdaq OMX, como la ganancia financiera ilegal, el robo de secretos comerciales o la amenaza a la seguridad nacional.
El Servicio Secreto fue la autoridad encargada de emprender las pesquisas pertinentes, a las que luego se ha sumado el FBI y miembros de la Casa Blanca. Ahora los investigadores temen no ser capaces de sellar las brechas del sistema de seguridad, sobre todo porque los piratas suelen buscar alternativas para adentrarse en sus objetivos.
Por el momento se desconoce el lugar de origen de la infiltración, pero algunas de las personas cercanas al caso revelan que algunas evidencias apuntan a territorio ruso. No obstante, los autores podrían haber utilizado ordenadores de Rusia como vía de entrada desde su verdadero origen.
El Nasdaq es la bolsa de valores electrónica más grande de Estados Unidos. En ella cotizan casi 3.000 empresas, entre ellas Google, Microsoft, Apple, eBay, Cisco o Citigroup. Cada día cambian de manos acciones por valor de casi un billón de dólares. La otra gran bolsa neoyorquina, NYSE Euronext o Wall Street, se apresuró a informar de que trabajan para garantizar que sus sistemas "operan en los más altos niveles de seguridad e integridad", según del portavoz Ray Pellecchia, que se negó a comentar posibles ataques sufridos por la compañía en el pasado.
Ya en 1999 un grupo de hackers informáticos se responsabilizó de un ataque contra las páginas de Nasdaq y de los principales medios de comunicación.
Las autoridades se mantienen alerta por ciber crímenes como el sufrido en 2010 por Nasdaq OMX. Las empresas estadounidenses son un objetivo continuo, y en muchas ocasiones los hackers vandalizan las páginas web para dañar la imagen corporativa. Normalmente no se hacen públicos los ataques a los sistemas internos por temor a que ello alarme a los clientes y a nuevos hackers informáticos.
WALL STREET JOURNAL 5/02/2011
http://online.wsj.com/article/SB10001424052748704709304576124502351634690.html