El ataque se produjo el pasado viernes 11 enero y borró toda la información de los ordenadores, según informó la concejala responsable del área, Ana Verdejo. Afortunadamente, según matizó la dirigente, únicamente se perdió información de lo que se trabajó ese día, ya que el sistema hace copias regulares con frecuencia de toda la documentación y se custodia al margen del sistema.

La concejala añadió que los niveles de seguridad del ayuntamiento son los habituales en una administración, con medidas para prevenir este tipo de ataques. "Aunque afectó a todo tipo de tramitaciones de aquel día, no se ha dañado información por existir copias de seguridad", concluyó.

 

Según fuentes de la investigación, el ataque fue sofisticado y estaba destinado a destruir documentación específicamente dal sistema del Ayuntamiento de Teruel. Especialistas de Madrid y Zaragoza se han desplazado a Teruel para investigar este ataque informático y trabajan sobre distintas hipótesis. Fuentes de la investigación aclararon que únicamente se buscó borrar información y que no se habían producido intentos de chantaje o extorsión.